El Gobierno Provincial recorto la planta política y se ahorrará $32.000 Millones de pesos

El gobierno provincial anunció que su estrategia de reducción de la estructura política ha resultado en una disminución del gasto estatal mensual de aproximadamente 2500 millones de pesos. En términos anuales, este recorte equivale a un ahorro de 32.000 millones de pesos.

José Luis Ousset, jefe de Gabinete del gobierno de Rolando Figueroa, destacó la precisión con la que se pidió a los ministerios que se centraran en esta tarea. “Lo han hecho y por eso todavía estamos finalizando el cierre de estructuras”, dijo.

La disminución de la estructura política fue una promesa de campaña del nuevo gobierno, que está en la etapa final de su implementación, dos meses después de asumir el liderazgo político de la provincia.

En una entrevista con la radio LU5, Ousset detalló el trasfondo del plan. “Nos hemos centrado en aquellas áreas que requieren un enfoque especial, creamos una Secretaría de Emergencias, dirigida por la doctora Luciana Ortiz Luna, que coordina todos los dispositivos de vulnerabilidad. También hemos elevado el nivel del área de seguridad y, por supuesto, los ministerios de Salud y Educación, que tienen un papel central en este momento”, explicó.

“Además, hemos reforzado la reducción en el resto de los ministerios, a los que les hemos pedido que fusionen todas las áreas posibles con el objetivo de reducir al máximo el gasto estatal en este tipo de cargos sin afectar la eficiencia”, añadió.

Ousset consideró que “ninguna otra provincia ha hecho este esfuerzo para reducir estos gastos”.

El plan incluyó la ocupación del 90% de las estructuras operativas del Gobierno con personal de planta permanente, dejando sólo uno de cada diez puestos a cargo de funcionarios designados por la administración de Figueroa.

“Desde el 11 de diciembre, todas las áreas administrativas y los servicios esenciales están funcionando con total normalidad”, afirmó Ousset.

El plan de Figueroa para recortar el gasto público, además de ahorrar en designaciones de funcionarios, incluyó la eliminación de teléfonos móviles y la cancelación de contratos de alquiler de vehículos innecesarios, principalmente camionetas.

El recorte del gasto permitió destinar más fondos a las áreas y organismos que prestan servicios directos a la comunidad, dijo el jefe de Gabinete. La implementación de becas en Educación; la compra directa de medicamentos e insumos (a través de la Ley de Emergencia Sanitaria) en Salud; y las inversiones en Seguridad, son claros ejemplos de ello, señaló.

El plan para recortar el gasto incluyó una revisión exhaustiva de los recursos del área social. El gobierno informó que se realizaron los relevamientos y auditorías correspondientes, se verificó quiénes habían trabajado durante los últimos años, se les dio continuidad y al resto se les envió una carta documento. Lo que sigue es el avance de los sumarios y las posibles sanciones que pueden ser de despido si se constatan faltas injustificadas o abandono de cargo. Al mismo tiempo, aquellos que tenían cargos en el Estado y cobraban planes sociales, fueron objeto de denuncias judiciales.

La oficina de Recursos Humanos explicó que en la primera semana de trabajo se detectaron más de 750 personas que no se presentaron a trabajar; y que 256 presentaron certificados o licencias. El nuevo gobierno envió cartas documento a los protagonistas de estas situaciones y en el transcurso de la semana se terminarán de enviar otras intimaciones, lo que totalizará más de 1000 cartas documento enviadas a los empleados que pusieron en duda sus aportes reales a las reparticiones que les pagan sus sueldos.

Ousset reveló que la intervención del nuevo gobierno en la reorganización del área social logró una reducción del 70 por ciento de los cargos que heredó del gobierno anterior.

El funcionario precisó que el Estado provincial tiene unos 70 mil empleados, entre agentes y funcionarios. Ousset explicó que la gestión que integra eliminó la distribución de puntos en forma discrecional, que era un sistema para incrementar el volumen de sueldos sin contemplar, en muchos casos, las funciones.

Ousset señaló que las estructuras del Estado estaban excesivamente grandes, por lo que su acción fue reducirlas a la mitad para hacer cada área operativa. Esto se logra asegurándose de que las áreas cumplan con misiones y funciones que tengan sentido.

“Eliminamos completamente todo lo que no tenga un propósito, un objetivo específico y una misión. Por lo tanto, lo que la ciudadanía necesita saber y entender es que más allá de la cantidad de personas, necesitamos tener áreas fortalecidas para llevar a cabo las tareas. Entonces, no se puede desmantelar el Estado, pero sí se puede tener una política de ordenamiento fuerte, precisa, eficiente y efectiva, que es lo que hemos hecho”, explicó.