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Cómo evitar que las papas se peguen al horno (y los errores a esquivar)

No sólo influirá el tipo que se elige, sino que también sus cortes y formas. El horno y el aceite juegan un papel clave en la previa

ACTUALIDAD18/09/2024Neuquén NoticiasNeuquén Noticias
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Al momento de buscar una verdura de acompañamiento para las comidas, las papas se posiciona como una de las más elegidas gracias a la cantidad de preparaciones que se pueden realizar con un simple ingrediente. No obstante, hacerlas en el horno puede significar un problema para muchos debido a la facilidad con la que se pegan a la fuente.

Existen varias formas para evitar que esta preparación salga mal. Primero se debe hacer una buena selección de las papas y luego limpiarlas exhaustivamente, pero lo más importante está en la previa de la preparación: el horno debe precalentarse y la fuente debe estar engrasada con una capa de aceite antes de meterlas dentro para que no se peguen.

Trucos para que las papas no se peguen al horno

Uno de los primeros pasos para evitar que esta comida se pegue al horno estará en la elección del tipo de verdura. Aunque no todos tienen la posibilidad de elegir el tipo de papa que se llevan del verdulero debido a sus diferentes costos, lo cierto es que algunas como las russet y las doradas poseen un alto contenido de almidón, lo que las vuelve más propensas a dorarse con facilidad y minimizar las posibilidades de que queden pegadas en la fuente.

Una vez que se cuenta con una buena cantidad, el siguiente paso será hacer todos los preparativos previos para que queden en excelente estado antes de enviarlas dentro del horno. El lavado será fundamental para poder quitar los excesos de almidón que suelen fomentar la pegajosidad en la bandeja.

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Cuando se encuentren lo suficientemente limpias como para enviarlas con cáscara dentro del horno habrá que pelarlas. Hacerlo de esta manera reduce aún más su contenido de almidón, por lo que no se aconseja sacarles la cáscara antes de empezar a lavarlas.

Ya listas para cortarlas, su forma y tamaño también puede influir en que se peguen o no al horno y tengan una cocción pareja. La mejor manera es cualquiera que permita que se cocinen de forma uniforme, tal como ocurre con las rodajas finas y los cubos más bien chicos. Al elegir un tamaño más grande, es posible que se empiecen a quemar en los bordes, pero que no estén cocidas por dentro.

La cantidad que se colocan sobre la fuente puede estropear considerablemente la preparación. Por ello, se recomienda poner un número moderado y no hacer que se amontonen. Al no tener el suficiente espacio para cocinarse correctamente, puede pasar que comiencen a hacerse al vapor en lugar de asarse.

Un truco que no falla y que es ideal para quienes prefieren no utilizar el aceite es colocar un papel manteca para horno, que irá colocado sobre la base de la fuente antes de tirarles las papas por encima.

El horno y el aceite, claves en la preparación
Para lograra que las papas no se peguen en la fuente será imprescindible precalentar el horno aproximadamente 15 o 20 minutos antes de enviarlas dentro. Una de las formas más sencillas de calcularlo es encenderlo antes de empezar a lavarlas y cortarlas.

En ese sentido, el aceite jugará un papel clave una vez que están preparadas para enviarlas al horno. Se debe colocar una capa sobre la fuente (la cantidad debe ser la necesaria para tapar toda la base, pero quienes no deseen agregarle mucha cantidad pueden colocar unas gotas y luego distribuirlas con un papel de cocina), lo que permitirá crear una especie de capa que permitirá que no se peguen.

Para facilitar las cosas, también se pueden mezclar con un poco de aceite las papas previamente cortadas y recién ahí dejarlas en la fuente.

Errores que hacen que se peguen las papas

La falta de aceite es uno de los principales errores que hace que esta verdura se pegue y no se pueda sacar correctamente. Es fundamental que la fuente esté engrasada, ya que actúa como una especie de lubricante, que al mismo tiempo permite obtener el tradicional crujiente de estas verduras hechas al horno.

Lo mismo ocurre con los problemas de temperatura en el horno. Tener el fuego demasiado bajo puede provocar que las papas se hagan de forma más pegajosa y no logren obtener la textura habitual, por lo que es importante mantener siempre altas las temperaturas.

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