
En un mundo que demanda creatividad y pensamiento crítico, el sistema educativo argentino parece seguir anclado en un modelo de la era industrial: repetición, disciplina y ausencia de cuestionamientos. ¿Estamos formando ciudadanos libres o solo ignorantes funcionales? Una reflexión con voces de académicos y educadores, y un llamado a que cada hogar se convierta en motor de cambio.