Manuel Adorni, el audaz vocero presidencial, se lanzó a celebrar la llegada de un personaje de Breanking Bad y sus famosos "Pollos Hermanos"

La historia comenzó con un posteo falso en la red social X, donde el usuario @AlgunMatias se las ingenió para hacer creer al mundo que el empresario de pollos de la famosa serie Breaking Bad estaba ansioso por conquistar el mercado argentino de comidas rápidas. La imagen de Giancarlo Esposito como Gus Fring acompañaba la noticia, desatando la euforia en las redes.

Ante esta "bomba" informativa, el dirigente de Política Obrera no pudo resistirse y soltó una irónica frase: "Más comidas rápidas para menos comensales". Pero Adorni, lejos de detectar la broma, se tomó el comentario en serio y se enzarzó en un cruce con el histórico dirigente de izquierda.

"Estimado Jorge: las inversiones mejoran salarios, dan oportunidades y promueven crecimiento disminuyendo la pobreza y mejorando la calidad de vida de la gente. Lo invito a escapar de las encerronas ideológicas y sumarse a las ideas de la libertad", exclamó Adorni, sin darse cuenta de que estaba montado en una fake news.

La reacción de los usuarios de X no se hizo esperar, inundando la plataforma con memes y comentarios relacionados con la serie televisiva donde los pollos no solo vuelan en el plato, sino que también están vinculados a oscuros negocios.

"Los Pollos Hermanos" se volvieron tendencia, transformando el hambre en risas.

Incluso el experimentado Altamira se sumó a la diversión, poniendo en duda la veracidad del tuit de Adorni: "El aludido inversor en comidas rápidas es un fake. Ahora temo lo mismo con su tuit. ¿Será otro fake?", expresó con sarcasmo, resaltando la incongruencia de alentar las comidas rápidas en un contexto de bajos salarios y dudosas decisiones financieras.

En resumen, un día en la política argentina donde las risas fueron el platillo principal, y donde los pollos de Breaking Bad demostraron tener más poder de influencia que cualquier medida económica. ¡A esperar el próximo capítulo de esta trama tan peculiar!