Escándalo institucional en Catriel: el presidente del Consejo Deliberante amenazó con un arma a la intendenta y a un funcionario

La localidad de Catriel vive un escándalo institucional sin precedentes, cuyos protagonistas son las máximas autoridades comunales. El presidente del Concejo Deliberante, Alberto Ariaudo, fue denunciado por agredir y amenazar con un arma de fuego a la intendenta Daniela Salzotto y a su secretario de Prensa, Paulo Pérez. 

El hecho ocurrió durante la mañana del pasado viernes, cuando Ariaudo fue hasta la Municipalidad y se enfrentó con Pérez. La discusión verbal continuó con agresiones físicas. Ante lo sucedido, Daniela Salzotto presentó la denuncia formal en la Fiscalía por amenazas verbales y agresiones físicas

Según detalló el portal Catriel Online, Alberto Ariaudo ya había amenazado por mensajes de Whatsapp a la jefa comunal y exhibió un arma de fuego en el momento en que ingresaba al edificio municipal y expresó: “Los voy a matar a todos”. El hecho quedó registrado en las cámaras de seguridad. El funcionario se entregó por su propia voluntad y quedó detenido.

La Fiscalía dio inicio a la investigación, dialogó con testigos y comenzó a recabar pruebas, como mensajes de WhatsApp y correos electrónicos del teléfono celular de la intendenta.

El secretario de Gobierno, Daniel Delgado, comentó que vivenciaron “un hecho realmente lamentable en la Municipalidad” y señaló que la Fiscalía les ha solicitado preservar algunos detalles por la investigación en curso. 

"La intendenta ha sido víctima de amenazas, chicanas y maltratos, en especial tras anunciar medidas relacionadas con el control de la salud mental de los funcionarios y la transparencia en la gestión", sostuvo Delgado.

El Presidente del Concejo Deliberante fue el compañero de fórmula electoral de la actual intendenta. Delgado comentó que las diferencias comenzaron a partir de que la intendenta Salzotto anunciara medidas relacionadas con el control de la salud mental de los funcionarios y la transparencia en la gestión.

Alberto Ariaudo presentó su renuncia al cargo y la Justicia le impuso la prohibición de acercarse a menos de 300 metros de la intendenta, el Municipio y el Concejo Deliberante. Además, no podrá comunicarse con los testigos ni con las víctimas.